El jueves 8 se realizó una parodia de elecciones en La Bancaria; naturalmente, dieron “ganador” a Zanola, el único candidato. El burócrata, ya en la tercera edad, es uno de los principales acusados en la causa de medicamentos adulterados. Las elecciones, convocadas para el 23 de septiembre pasado, se habían suspendido por irregularidades en los padrones, hasta febrero del año próximo. Sin embargo, la Junta Electoral del gremio decidió realizarlas de todos modos. La lista opositora decidió no participar, a excepción de la seccional de Paraná donde, casualmente, resultó ganadora.
Los seguidores de Raúl Fontana (la oposición) siguen apostando a que la misma Justicia que permitió la realización de estas fraudulentas elecciones y permite que Zanola no esté preso, y nombra interventor de la OSBA al médico personal de Zanola, anule las elecciones. Están tan atados al aparato del Estado como el mismo Zanola.
Las causas contra Zanola siguen en pie, mientras los problemas de los afiliados de la OSBA se agravan. Con la posibilidad de la intervención del gremio, pedida por la lista opositora, el zanolismo ahora se ha “amotinado”; pero esta crisis recién comienza.
Los banqueros tienen planteados despidos masivos. Es necesaria la elección de delegados en todas las sucursales.
